Una de las premisas que forman parte del ADN de Can Ramonet es la importancia de ofrecer una experiencia de turismo responsable. Un turismo que aboga por los tiempos lentos, un viaje sin prisa, sostenible, respetando e integrando el entorno, siendo conscientes del aquí y el ahora.
Se trata de una filosofía que apuesta por el respeto hacia el entorno y hacia uno mismo, algo muy necesario teniendo en cuenta que vivimos en un contexto en el que vamos siempre a un ritmo rápido y por encima de nuestras posibilidades. Y justamente por esta razón, nace el movimiento de Slow life, un estilo de vida relajado, natural y consciente.
Los orígenes del concepto:
El concepto nació en el 1980 en el contexto gastronómico de Italia, cuando el periodista Carlo Petrini paseaba por la Piazza di Spagna de Roma y averiguó que en una de las esquinas iban a abrir un McDonald's. Esto supuso un punto de inflexión y Petrini, junto a un grupo de activistas, convocaron una manifestación en contra de aquella apertura para defender la alimentación tradicional. Así, en contraposición al fast food, este movimiento representaba el slow food.
Fue tal el impacto de este concepto que el autor Carl Honoré, con su libro Elogio de la lentitud, popularizo y amplió este concepto a todos los ámbitos de nuestra vida: nace así el slow life.
El concepto en el turismo
Uno de los ámbitos donde más relevancia ha tenido este concepto ha sido en el turismo, presentándose como una opción de turismo responsable que aboga por disfrutar sin prisa, con respeto al entorno, de forma sostenible y siendo muy conscientes del presente.
Es por ello que uno de los destinos favoritos para los que buscan slow travel son los lugares tranquilos y naturales como pueblecitos o casas rurales, donde pasar unos días, averiguar su entorno, vivir experiencias locales, profundizar en su naturaleza y simplemente volver a conectar con uno mismo.
Can Ramonet: destino slow travel
El concepto de estancia de Can Ramonet tiene mucho que ver con el slow travel. Cada rincón de la casa está pensando para que nuestros invitados puedan vivir una experiencia tranquila y consciente en un entorno natural y sostenible. Lo hacemos así como parte de nuestro proyecto de casa rural sostenible y por que, en un mundo en el que todo va demasiado rápido, abogamos por aquello que aún conserva su lentitud.